Tantos momentos que quedarán guardados como pequeños tesoros relucientes.
Buenos y malos momentos que han forjado nuestra actual identidad.
Tantos y, a la vez, tan pocos. Nos quedan muchos pequeños momentos que atesorar, muchos recuerdos que guardar con cariño, o sin él, pero que formarán parte de nuestra historia personal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario